Censo de los juveniles de la colonia. Temporada 2023

1. Conteos por observación directa

Para censar a los juveniles que superaron todas las etapas de su crecimiento, en colonias instaladas en acantilados o en superficies con vegetación, tendremos que diseñar algún procedimiento de conteo indirecto, cualquier procedimiento basado en la observación directa nos llevará a estimas muy erróneas, que tienen un escaso valor biológico, en el seguimiento de esa colonia. Debemos tener muy en cuenta que los pollos durante la mayor parte de su estancia en el territorio de cría se encuentran escondidos entre la vegetación, casi siempre en el mismo refugio. Allí encuentran protección ante sus potenciales depredadores o agresores, y también de los fenómenos meteorológicos, las radiaciones solares ... Cuando los anilladores entran a marcarles, en la temporada que más fácil lo tuvieron, no llegaron a encontrar ni a la mitad de la población y, en esta campaña, a menos de la cuarta parte de ellos. Resulta especialmente complicado encontrar a los más pequeños, que se mantienen, sin moverse lo más mínimo, en los huecos más inaccesibles de la vegetación. Si analizamos los resultados de los censos que he realizado a los pollos de este año, a partir de los mapas de mayor resolución (con una visualización muy buena), vemos con claridad que, ni el conteo por observación directa, haciendo uso de telescopios, ni adentrarse en la colonia para contarlos sobre el terreno, dan resultados aceptables.

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Referencias sobre cada entrada:

A Conteos en el acantilado de todos los pollos sin anilla de PVC que tenían a la vista sus dos tarsos, en su totalidad.

B Aquellos pollos anillados que se encontraban en la colonia, y tenían sus dos tarsos a la vista, sin obstáculos por delante, ni objetos en el fondo que pudieran causar confusiones.

C Otros pollos: Individuos que se encontraban en el acantilado y que no dejaban libres, y a la vista, la totalidad de sus dos tarsos, bien porque estuvieran echados, parcialmente escondidos entre la vegetación o porque hubieran obstáculos que lo impidieran, o causaran confusión.

D Número total de pollos o juveniles observados en el acantilado.

E Juveniles encontrados en la playa (con o sin anilla de PVC).

F Porcentaje de pollos que pude observar en el acantilado, con respecto a la estima real de la población total.

Observando los registros de la tabla anterior, tenemos una valoración de la validez que pueden tener los censos de pollos, por observación directa, que realicemos en la colonia. Vemos que el número de pollos o juveniles que están a la vista se encuentran en un intervalo comprendido entre el 11% y el 19% sobre la población total, con un promedio global del 15% de ellos. Es absurdo, por lo tanto, censarlos por este procedimiento, en aquellos terrenos que cuenten con cierta cobertura de vegetación, debiendo acudir, irremediablemente, a procedimientos indirectos, basados en criterios de proporcionalidad.

 

Primera aproximación al censo de pollos de esta temporada


A partir del 28 de junio, se empiezan a ver los primeros pollos en la playa, comenzando una nueva etapa en el seguimiento de la colonia. Todos los conteos realizados sobre los mapas de la colonia, a partir de esta fecha, arrastran un sesgo, que devalúan la precisión del resultado global. Se debe tener en cuenta que los pollos de mayor edad no se dejaron capturar, quedando sin anillar, y son, además, los primeros que bajan a la playa.

A pesar de lo comentado, se puede realizar un censo orientativo, siendo conscientes de que se producirá un ligero error deficitario. Aunque el muestreo no es suficiente, sí es válido para obtener una primera estima.

Vemos que el promedio simple de los índices parciales "I" arroja como resultado la proporción de 3'7 pollos no-anillados por cada pollo con anilla. Como fueron marcados 34 pollos con anilla de PVC, estimamos que en total contamos en la colonia con 34 · 3,7 + 34 = 160 pollos-juveniles. Pero como hay mucha diferencia de tamaño en los muestreos parciales, podemos mejorar la estima utilizando el índice promedio ponderado, que presenta un valor de 3,9 pollos no-anillados por cada pollo con anilla, generando una estima de 34 · 3,9 + 34 = 167 entre pollos y juveniles en la nueva generación de 2023. Un valor con una buena aproximación a la estima que hice cuando los juveniles bajaron a la playa. En la comparación con el censo que realice desde la playa, hay que tener en cuenta que alguno de estos pollos (pocos) no llegarían a realizar su primer vuelo, al ser baja antes de llegar a la última etapa de su desarrollo.

Este censo no informa de la cantidad de pollos que completan su desarrollo, sino de los que se encontraban en la colonia en los 15 días que sucedieron a la jornada de anillamiento, antes de que abandonaran mayoritariamente el acantilado.

También conviene tener en cuenta que los censos realizados por el método de captura-recaptura en las colonias de gaviotas de Audouin pueden ser deficitarios, dejando fuera del doble conteo a los individuos de mayor edad (mejor capacitados para evitar su captura) y también a los más tardíos (muy difíciles de ver si el territorio de cría está cubierto por vegetación) y los procedentes de puestas de sustitución (que en algunas campañas pueden suponer una cantidad significativa). Estos sesgos pueden proporcionar resultados de poca fiabilidad cuando la colonia se sitúa en terrenos cubiertos parcialmente por la vegetación.

2. Metodología empleada en los censos que realicé en la playa

Como ningún censo puntual puede aportar un dato fiable, tuve que recurrir a realizar un procedimiento de censado múltiple. Hay que tener en cuenta que:

  • El régimen de bajada de los juveniles a la playa no es un suceso aleatorio, sino que presenta cierta vinculación con la madurez de los juveniles y su solvencia en el vuelo.
  • Entre los juveniles más adelantados y los que nacieron tardiamente hay un intervalo temporal superior a los 30 días.
  • El índice que expresa la relación existente entre los individuos no-anillados y los anillados varía a lo largo de la jornada y entre un día y otro. Hay que tener en cuenta que los pollos de mayor edad y los más pequeños son casi imposibles de capturar, por motivos diferentes: los primeros porque saben moverse con rapidez en el acantilado, e incluso escapar realizando cortos vuelos, y los segundos porque permanecen bien escondidos y son muy difíciles de encontrar.
  • Como consecuencia de lo dicho en los puntos anteriores, los primeros juveniles que bajan a la playa y los últimos en hacerlo (los más tardíos), hará que los primeros días de censos y los últimos, presenten índices muy atípicos. Algo parecido puede suceder a lo largo de cada jornada, desde las primeras horas hasta pasado el mediodía.
  • Al censar varias veces en el mismo día, estos desequilibrios quedan compensados. E igualmente, al repetir los conteos durante varios días, en el mismo tramo horario, desde que bajan los primeros juveniles hasta que todos abandonan la colonia.

De todo lo dicho se puede concluir que se pueden emplear dos estrategias para realizar censos compensados:

  1. Censos múltiples en el eje vertical: Conteos realizados a distintas horas dentro de la misma jornada. Conviene realizar en cada jornada 4 ó 5 censos parciales, repartidos (más o menos periódicamente) a lo largo de unas 4 horas de observación. Como mínimo habría que realizar 3 jornadas de censo:
    • Tras 7-10 días desde que bajaron los primeros juveniles
    • 15 días después (tras 3 semanas desde que bajaron los primeros juveniles a la playa).
    • Pasados unos 10 días más.
  2. Censos múltiples en el eje horizontal: Conteos bien repartidos, a lo largo de todo el periodo, desde que bajan los primeros juveniles hasta que lo hagan los últimos. Siempre en el mismo tramo horario.
  3. Para conseguir resultados óptimos, suelo utilizar censos en ambos ejes, asegurando, de esta forma, que los resultados sean muy exactos.


3. Censo por procedimientos indirectos

Pero sabemos que todos los pollos que están en el acantilado serán vistos en los lugares de reunión y refresco de la playa cuando vayan adquiriendo capacidad para volar. Así que podemos esperarles allí, sin nada que obstaculice la visibilidad, a corta distancia de la orilla, en unas condiciones inmejorables para la observación.

Pero nos encontramos con algunas limitaciones a las que deberemos dar solución: la estancia en las rocas de las playa es temporal, produciéndose un continuo ir y venir de juveniles y adultos, de forma que el muestreo que pueda realizarse en cualquier momento puntual es siempre de baja calidad estadística. Veamos los resultados para la presente campaña, en la siguiente tabla.

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Referencias sobre cada entrada:

A Conteos puntuales de todos los juveniles sin anilla de PVC que se encontraban en las rocas o en la ribera de la playa, y tenían a la vista los dos tarsos, en su totalidad. Simbolizado por "N".

B Cantidad de pollos marcados con anilla de PVC en cada conteo puntual. Simbolizado por "A".

C Tamaño de cada una de las muestras. Representado por "M".    M = N + A

D "I" es el índice obtenido al calcular la proporción entre los juveniles no-anillados con PVC, y los no que sí la tienen:   I = N / A.   Este índice expresa la cantidad parcial de individuos no-anillados que hay por cada juvenil anillado.

Como podemos ver en la tabla, el muestreo más amplio que pude realizar a los juveniles que se encontraban en la playa tuvo un tamaño de 24 individuos, que para una población que, como veremos más adelante, supera los 160 jóvenes, es de una baja calidad; pero al realizar un amplio muestreo múltiple, con 21 actuaciones, correctamente repartidas durante el periodo de tiempo que va desde primeros de julio y principio de agosto; trabajando en censos de doble eje, veremos que llegamos a unos niveles de precisión de muy alta calidad. No solamente es posible censar correctamente en colonias situadas en acantilados, sino que además es posible alcanzar un grado de precisión que supera, con creces, las máximas exigencias.
El trabajo matemático que sigue, a continuación, requiere hacer uso de la ecuación de Lincolm-Petersen, usada habitualmente cuando se realizan censos de poblaciones cerradas, empleando la técnica de la captura-recaptura. Como se ha repetido el procedimiento 21 veces, he tenido que aplicarla otras tantas veces, y promediar los resultados parciales. Veamos:

P = C (M/A)

Siendo "P" el tamaño de la población que estoy calculando, "C" el tamaño de la captura, "M" el tamaño de la muestra de la recaptura y "A" el número de individuos marcados que se recogieron en la recaptura.

La técnica que estoy utilizando, es exactamente la misma que la empleada en el procedimiento de la captura-recaptura, pero sustituyendo la recaptura por la observación. De esta forma, sólo será preciso entrar una vez en la colonia, para realizar el anillamiento de los pollos. Por lo tanto:

"P" es el tamaño de la población que estoy calculando (juveniles que realizaron sus primeros vuelos), "C" el número de pollos anillados (primera y única captura), "M" el número de individuos observados (tamaño de la muestra de cada censo parcial) y "A" el número de pollos anillados que se contabilizaron en cada censo parcial.

Para realizar este censo múltiple, prefiero trabajar con una ecuación equivalente:

Siendo:

"P" La población de los juveniles de la colonia.

"C" el número de pollos anillados supervivientes en esta temporada, aquellos que consiguieron realizar sus primeros vuelos, y fueron vistos en la playa.

"I" el índice promediado de los 21 censos realizados, que expresa la relación existente entre los juveniles no-anillados y aquellos que sí la tenían. En esta campaña es 4'11, por lo tanto, por cada juvenil anillado, hay un promedio de 4'11 que no están anillados.

Aplicando la ecuación P = C · I + C = 33・4'11 + 33 = 169 juveniles.

A partir de un Índice promediado simple, empleando un procedimiento indirecto, sabemos, con una buena precisión que el número de juveniles que superaron todas las etapas de crecimiento, y consiguieron realizar sus primeros vuelos, es una cantidad muy cercana a 169. individuos.

4. Índice promedio ponderado.

Siendo en sí una muy buena aproximación al censo de juveniles el que se obtiene a partir del índice promediado simple, es mejorable. Vemos que los 21 censos simples realizados, no tienen un tamaño similar, oscilando las muestras entre los 7 individuos y los 24. Evidentemente, sin ser ninguno de los censos simples una muestra suficiente, tiene bastante más calidad aquellos censos con mayor tamaño, así que podemos aplicar una media ponderada, para conceder mayor representatividad a aquellos muestreos más numerosos:

Referencias sobre cada entrada:

A Conteos de todos los juveniles sin anilla de PVC que se encontraban en las rocas o en la ribera de la playa, y tenían a la vista los dos tarsos, en su totalidad. Simbolizado por "N".

B Cantidad parcial de pollos marcados con anilla de PVC. Simbolizado por "A".

C "I" es el índice obtenido al calcular la proporción entre los juveniles marcados con anilla de PVC, y los no que no la tienen:   I = N / A.   Este índice expresa la cantidad parcial de individuos no-anillados que hay por cada juvenil anillado.

D Tamaño de cada una de las muestras. Representado por "M".    M = N + A

E "I · M" Cantidades parciales obtenidas al multiplicar cada índice puntual por el tamaño de cada muestra (cantidad parcial ponderada).
 
Lo primero que nos llama la atención es que entre el Índice promedio simple y el ponderado, hay una mínima diferencia de 3 centésimas, lo que nos da a entender que estamos ya en niveles de precisión muy altos.

Aplicando la ecuación P = C · I + C = 33 · 4'14 + 33 = 170 juveniles. Un censo de muy alta precisión de los juveniles que alcanzaron la playa en esta temporada.
 

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